"Todo por cuanto la humanidad se mueve es fruto del deseo, y éste es, sin duda, fruto de la actividad mental. Se hace necesario un cambio de atención en el hombre, con el fin de que no sean los deseos los que continúen prolongando su agonía".
"Todo es energía, aquello que ven como aquello que se les escapa a la observación física. Por esto, las interpretaciones deben originarse desde un estado de quietud física, mental y emocional que ensanche los horizontes a observar".
"Cuando se sumergen en la meditación en un modo contemplativo, las observaciones sugieren otra Realidad bien distinta a la de una observación mental y/o emocional. Y este es, sin duda, el camino a seguir, puesto que las energías vibratorias universales apuntan en este sentido para este planeta. El cambio se está produciendo en todos ustedes, aunque las apariencias indiquen lo contrario, mas abran los ojos del alma para ser partícipes de esta Realidad".
"El deseo se corresponde a una energía de bajo calado vibratorio que se origina en nuestro propio sistema energético sutil cuando no existe aún un equilibrio que les oriente significativamente. Por esto, les conmino a contemplar los distintos desajustes internos de su estructura vibratoria, con la finalidad de adquirir la paz necesaria para aventurarse en campañas más profundas".
"Los pensamientos que les embargan a movilizarse en un sentido u otro, y los deseos que consiguientemente se producen les condicionan sobremanera en el reconocimiento e interpretación justas de cuanto acontece en Realidad".
"La Realidad de un espíritu libre de mente y deseo es absolutamente distinta a la de un espíritu presa de las apariencias de un mundo mental y emocional. Si su mente no está en calma seguirá presa de los deseos, y por estos que se moverá por este mundo, luego la interpretación del mismo será pobre e insuficiente en cuanto a sus posibilidades de maniobra".
"El camino está bien definido vibratoriamente, y muchos avatares y seres de luz apuntan al reconocimiento espiritual fruto de la entrega, el perdón y la observación contemplativa. Todo el que se encuentra a sí mismo, se libera para siempre".
"¿Se preguntarán como encontrarse a uno mismo, verdad?... Pues no lo hagan, puesto que será la mente la que le conduzca, y no es este el propósito de estas palabras. Es bien distinto, sólo debe vivenciar la experiencia derivada de una meditación contemplativa ajena a cualquier estímulo físico, mental o emocional. Ustedes sólo deben entregarse a la práctica, nada más".
"Sea consciente de su propia naturaleza espiritual, y de la de todo lo que le rodea en esencia. Esta es la Verdad y el Camino. Sumérjase entonces en el y no siga distraído por las apariencias mentales y emocionales que le esclavizan aún sin ser ustedes conscientes de ello".
"Llegados a este punto, el camino está claro, mas debe ser usted únicamente el que dé el paso definitivo que le despierte del letargo en el que está sumido por causa de la carne y la mente que ha adquirido en esta existencia con la finalidad de someterse a la probatura. Por esto, ustedes deben decidir si ha llegado el momento en el que deban despertar del sueño, aún con carne que les condicione".
"Si ustedes quieren dar continuidad al río de la vida que lleva aguas vibratorias que apuntan al despertar del espíritu en este planeta, no lo dude más, contemple en silencio y sumérjase sin más dilaciones en el camino que le conducirá a la libertad de un despierto".