Todas las llamadas confluyen en este momento vibratorio de cambios irreverentes. La condición mental se retuerce para plantear dudas, y es el espíritu el que encuentra cancha en la que mostrar sus dotes de Realidad inexcusables.
Atrévase, no tema mal alguno, pues es tiempo de Ser y no de pensar, es tiempo de percepciones y no de conjeturas..., sin más, es tiempo presente y no pasado o futuro. Todos somos ese espíritu que por momentos hasta ahora se mostraba tímido e indefinido. Pruebe a ser usted mismo e interiorice en la Realidad del Ser.
Desde muchos planos vibratorios confluyen tendencias evolutivas poderosas e incuestionables para aquellos que mediten en el silencio. Si usted contempla observará que el Todo se moviliza en un único sentido vibratorio. Y este nos conmina a despertar como espíritus libres y tolerantes.
No tema por lo que las apariencias le indiquen, observe en profundidad para que la aparentemente densa capa de iniquidad y oprobio se diluya en el olvido de lo que parecía y no es. La Verdad subyace bajo todo signo de apariencia. Dispóngase a ser y no a creer, sea espíritu y no apariencia de mente, sea Verdad y no apariencia de maldad, sea cambio y no apariencia de crisis. La Verdad está aquí, sólo que usted no la observa por entre la densa capa que la oculta.
Si usted medita contemplativamente, se funde en la observación desinteresada y arreactiva, en verdad que las apariencias que le mantenían en una vida de ignorancia, esclavo de los sentidos y de una mente torticera, darán paso a la libertad y la luz que siempre estuvieron pero que no fueron reconocibles.
Muchos seres, maestros ascendidos de éste y otros planos vibratorios confluyen en este momento para alentarnos en el reencuentro interior, en el reconocimiento de la Verdad que Yo Soy el que Soy. Somos espíritus que tomando carne en este mundo, hemos venido a despertar de la ignorancia y a tomar certeza de la Realidad espiritual.
Nada puede sesgar el impulso vibratorio de este tiempo, pues el río evolutivo universal nos inunda ya con sus aguas de cambio. No luche más contra lo inevitable de la evolución. No sufra por las apariencias. Disponga su atención en la Verdad del espíritu. Y sea uno con el Todo. Somos y hemos de sentirnos partícipes de la Creación, todos iguales movidos por una maquinaria evolutiva perfecta e inquebrantable.
Nada queda a su suerte, todo sigue su curso perfecto aunque las apariencias digan lo contrario. Llegados a este punto, ustedes buscadores de la Verdad, deben cesar para encontrarse, para dejarse arrastrar por el sendero inequívoco de la Realidad espiritual. Muchos son las energías que nos alientan en este camino hermoso pero que en apariencias se muestra como tortuoso e irreconocible.
Si estamos en lo que somos, en verdad que la luz vibratoria que es reflejada sobre nosotros por muchos focos hermanos nos impulsará a nuevos y hermosos horizontes de Realidad. Seamos pacientes, pero hagamos nuestra parte del trabajo, que nos es más que la disposición atenta al proceso de evolución espiritual que se deriva de una práctica contemplativa arreactiva.
Aprenda a contemplar desde las alturas que le brinda el reconocimiento de su propia naturaleza divina, entiéndase como parte de un Todo, de manera que ni es más ni es menos, sólo esté atento al Ser. Vivencie el momento, goce del silencio resultante de una mente que pierde enteros en el proceso evolutivo. Y, sobre todo, sea usted mismo, libre de la careta de la personalidad mental a la que se ha visto sujeto durante el trance de esta vida carnal.
Se preguntará, ¿Si no hay mente....que me queda?... Para el que contempla con atención, entiende que el silencio resultante le arrebata de la cárcel de la ignorancia. Es entonces que... Yo Soy...