Imagen que tomé al atardecer en las cumbres de Tenerife en Canarias (España) |
"Lo inconmensurable se abre ante ustedes en cuanto se adentren en estados de meditación más profundos, y estos tiempos así lo demandan. Cada uno de ustedes es una pieza fundamental en el perfecto organigrama energético de este plano vibratorio en el que se mueven, pero igualmente lo es en el conjunto vibratorio de este sistema planetario, del universo y de la Creación en sí misma".
"Nadie queda ajeno al conjunto, y de una manera u otra sus vibraciones son necesarias para el continuo devenir de las energías que interactúan con cada uno de nosotros. Tengan a bien el saber que todos somos parte de un sincronismo vibratorio excelso que nos impulsa a un crecimiento continuo. Así, a lo largo de los tiempos la evolución es el argumento que moviliza las energías, pero eso sí, siempre contando con libre albedrío en la concreción de las distintas acciones".
"Hasta ahora han evolucionado, en la mayor parte de las veces, fruto del tropiezo continuo y desmedido que, provocando dolor y trauma, ha derivado en una obligada reordenación de la atención del individuo y por ende del conjunto. Por tanto, llegan momentos en que el individuo sea consciente de su participación directa y necesaria en el devenir del conjunto. El conjunto vibratorio resultante de la suma de las distintas tendencias energéticas confluyentes en este mundo, debe ser evidente para toda la humanidad".
"No teman mal alguno poniendo la atención en un futuro aparentemente incierto por como se desarrollen los acontecimientos mentales de su mundo. Hay que estar por encima de todo esto y contemplar desde el espíritu como existe un río de vibraciones que apunta hacia la evolución. Este es el camino que ustedes deben emprender sin más dilaciones".
"Observen pausadamente como las apariencias se disuelven ante el poderoso e irrefrenable impulso evolutivo universal. Láncense a este río singular, y observen desde su interior como la paz y la armonía les brinda el sosiego necesario para aventurarse en esta existencia. Desde ahí la observación se magnifica, de manera que el individuo se diluye en la inmensidad del conjunto, del todo vibratorio. Esto somos y nada más. Somos energía viva, energía evolutiva".
"No se importunen por aquello que les rodea por duro o incomprensible que se manifieste antes sus ojos, pues si observan con mayor amplitud de campo, la Realidad será bien distinta. Se trata de observar con las vibraciones sintonizantes con la energía universal. Desde ahí todo se ve distinto, pues ya nada queda oculto.
El que es capaz de acceder a estas vibraciones de evolución universal, ya nada le es ajeno en cuanto a conocimientos e interpretación de la Creación".
"Los miedos son poderosos actos reflejos de sus mentes, que gozando de una atención desmedida por su parte, oprimen para seguir manteniendo el control. La mente mantiene oculta la Verdad, luego si se prestan a la meditación contemplativa, las certezas tomarán partido para disolver los temores establecidos. Para el que contempla y cuya atención goza de afinidad vibratoria con la energía universal evolutiva, lo oculto se disuelve para siempre. Y si se perpetúa en este estado, las aguas evolutivas le conducirán al reencuentro definitivo con el Todo".
"Este es el camino que todos deben emprender, donde ninguno goce de privilegios con respecto al resto, donde desde este estado los individuos den paso al conjunto planetario. Y de esta manera, la Realidad se establezca en sus vidas de una manera perentoria".
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