DISTINGUIR EL CAMINO DEL ESPÍRITU

Palabras de un hermano de Luz...

   
   "...Desprendeos de todo aquello que os confunde o turba, hermanos míos, y tened bien presente que la agresividad o la ignominia son estados que en nada se acercan a la Verdad. Os parece por momentos que el mundo de la carne en el que os sometéis a la probatura se tambalea por causa de la mezquindad y la iniquidad de aquellos que lo pueblan, que por otra parte, son vuestros hermanos".

   "Pero yo os digo, que la Verdad se halla clara y diáfana a los ojos del despierto, por esto que os insto a que recobréis el sentido de vuestras vidas. Que ahondéis en el conocimiento de la Verdad. Que honréis vuestra divina presencia, aquella que se haya manifiesta en vuestro espíritu y que precisa de vuestra atención continuada para ser rescatada tras un largo periodo de latencia".

   "Vuestra Madre interior está presta a consolaros y acompañaros en el Camino que conduce hasta el Padre. Ese despertar interior os impulsará a nuevos estados de consciencia de la Verdad. El conocimiento está presto a seros revelado, mas poned atención en contemplaros como parte de un Todo indivisible".

   "No estáis solos en el Camino, mas os sentís abandonados en el camino de la carne. Pero sabed que tomando tiempo para la meditación contemplativa, el conocimiento os abordará antes o después. La soledad es parte del viajero de la carne, pero nunca lo fue para el espíritu que ahonda en el Camino de la Verdad".

   "Distinguid entre Camino y camino, porque si os abonáis a la carne, pasaréis del sufrimiento y la desidia a la algarabía y la salud, y viceversa. Entonces viviréis esclavos de un movimiento energético pendular del que sólo la lucidez que se deriva de la contemplación os puede arrancar".

   "Yo Soy el que Soy, mas heme aquí a vuestra diestra, presto a adentraros en el conocimiento del Camino. Aquel en el que el hombre no tiene cabida. Aquel donde la mente ya no alcanza. La delgada línea que separa el despertar de la ilusión de la carne se encuentra ahí mismo ante vosotros".

   "Estoy aquí para jalear vuestros pasos, aquellos que, sin duda, van encaminados al despertar de vuestro espíritu. Con la práctica contemplativa sostenida en el tiempo, ganaréis en consciencia de donde termina este mundo carnal y empieza el del espíritu".

   "La sabiduría os aguarda..."